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6. ¿Necesitan los futuros docentes más formación?

Esta semana en clase hemos podido conocer la existencia de los llamados Libros Blancos que son una recopilación de documentos, normalmente redactados por un experto en la materia, que buscan informar a la población general acerca de un tema. Estas publicaciones buscan que los ciudadanos se acerquen a esa área de conocimiento y así entiendan los problemas que se exponen y que puedan tener una opinión acerca de las soluciones propuestas.

En este caso, hemos podido asomarnos al Libro Blanco de la profesión docente y su entorno escolar, publicado en 2015 por el Ministerio de Educación y redactado por José Antonio Marina. En este documento se lleva a cabo un análisis de la situación actual de la educación, examinando sus deficiencias y sus virtudes. En función de ese primer análisis, Marina desarrolla veinte propuestas que buscan mejorar el sistema educativo español.

Uno de los principales puntos de este texto se encuentra en la séptima propuesta, donde plantea la insuficiencia que presenta la actual formación de los futuros docentes. Marina sugiere un modelo que denomina Docentes en Prácticas (DEP) y que consistiría en añadir dos años de prácticas a los cuatro años de grado y al año de máster que actualmente tienen que completar los estudiantes. De esta manera, se desarrollaría un sistema similar al MIR médico, donde los alumnos estaría arropados por un tutor que les evaluaría para que, a la hora de enfrentarse a un aula en solitario, ya contasen con dos años de experiencia.

Esta propuesta es, sin duda, innovadora y cuenta con multitud de partidarios y detractores. Bien es cierto que los profesores cuentan con muy poca experiencia o, en múltiples ocasiones, ninguna experiencia cuando empiezan a impartir clase. Sin embargo, ¿es esta medida una solución que los futuros docentes y los actuales profesores estarían dispuestos a aceptar? Para poder llevar a cabo esta medida sería necesario contar con profesores que estén dispuestos a colaborar con esta misión de tutores. A su vez, los futuros docentes verían comprometido otro año en el que no está claro el sueldo que recibirían. ¿Sería este salario compensado si se asignan las prácticas en otra provincia?

La experiencia solo se puede conseguir con experiencia. Hasta que una persona no se enfrenta a una clase con sus medios y estrategias, tomando sus propias decisiones y sin estar arropado por un tutor, no va a saber lo que realmente supone ser profesor. Además, tal y como refleja Marina en el Libro Blanco, los docentes precisan de una continua formación que no se detiene cuando ya están enseñando en un aula. Es necesario seguir haciendo cursos para poder estar al día de los avances en educación y de cómo implantarlos usando nuevos recursos. Por lo tanto, podemos considerar que la formación de un docente siempre va a ser insuficiente ya que es imposible predecir el futuro y que igual esta séptima propuesta puede no ser la solución a la ineficacia de la formación de los futuros profesores.

¿Tú qué opinas de esta propuesta? ¿Sería viable? ¿Mejoraría la educación en España?

See you soon!

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